Seguir emprendiendo, pero esta vez con el plus de hacerlo con vistas a cuidar el futuro del planeta. Noé Jesús Boada Domínguez, taxista de Yunquera de Henares desde el 24 de marzo de 2010, lo tuvo claro a la hora de acogerse a las ayudas LEADER de ADAC para renovar su taxi, pieza principal de su negocio. Ahora transita las calles, polígonos y los alrededores del pueblo de Yunquera de Henares con un vehículo totalmente equipado para dar servicio a sus clientes, algo que asegura ser “necesario para ayudar a la población”.
El vehículo adquirido sustituye al taxi con el que comenzó el servicio en 2010. Un cambio que no solo se fundamenta en la antigüedad del primero sino también en la necesidad de hacer las cosas bien por el planeta. ”Decidí comprarme un modelo ECO con el que estoy muy contento. Además de adaptarse a las restricciones de circulación que actualmente hay y en un futuro se van a contemplar, y de ayudar a la reducción del cambio climático, económicamente hablando es una buena inversión”, asegura Noé.
El nuevo taxi introduce cambios fundamentales en la naturaleza de la tecnología. Su apuesta por el funcionamiento con GNC (gas natural) y no por combustible gasóleo, como el primero, le permite reducir en gran medida las emisiones de gases de efecto invernadero, además de un ahorro bastante notorio.
Beneficiario de ayudas LEADER de ADAC
Noé es uno de los tantos beneficiarios de la zona de actuación de ADAC que ha recibido ayudas LEADER, en este caso no solo para impulsar su actividad sino también para poner su granito de arena en favor del planeta. En concreto, la ayuda LEADERA supone el 34 % de la inversión total que asciende a 20.500 euros. “La ayuda me ha ido muy bien y animo a todos los que puedan a acogerse a ella”, asegura Noé que, además, nos cuenta lo fácil que fue tramitarla gracias al asesoramiento de ADAC. “Se han portado fenomenal. A mí no me gusta hacer papeles y creo que a nadie, pero en esta ocasión ha sido bastante sencillo. Estoy muy contento con ADAC”, explica.
Además, anima al resto de emprendedores a solicitarla. “Llegué a ADAC gracias a personas de mi entorno. La primera vez que me puse de taxista en Yunquera de Henares (mis comienzos se remontan a Alcalá de Henares) no sabía que existían estas ayudas y para entonces ya había adquirido el primer vehículo en 2008, por lo que no me pude acoger. Pero varios años de servicio y muchos kilómetros, me di cuenta que era necesario renovar el vehículo a uno nuevo con las características que he mencionado y no me lo pensé dos veces, directamente acudí a ADAC”, concluye.