Una de las mayores habilidades y garantías de éxito de un emprendedor es encontrar ese nicho de mercado sin explorar con el que otros no han dado. Ese sería el caso de la empresa Ibergrading, ubicada en el Centro de Iniciativas Empresariales del Ayuntamiento de Torija y dedicado al reciclaje, restauración y venta de piezas de maquinaria clasificadora de huevos.
“Es una actividad muy poco conocida, un nicho de negocio muy pequeño y a todo el mundo le parece un poco raro; pero huevos clasificados vemos en el mercado por todos lados, en cualquier tienda o supermercado”, explica Simona Ionela, una ingeniera industrial rumana que en 2011 montó esta empresa que hoy acumula medio centenar de clientes por todo el mundo.
“Las clasificadoras son maquinas industriales bastante complejas. Hay varias fábricas en el mundo, pero hay una que prácticamente mantiene el monopolio, que es la holandesa Moba”, explica Ionela.
A su llegada a España comenzaron a trabajar con el proveedor de esta marca y fue ahí cuando surgió la idea de negocio. “Mucha gente compra máquinas nuevas y las antiguas o se desechan o se mandan a otros países en África o América del Sur, pero son muy antiguas y necesitan reparaciones o piezas que a veces no se encuentran. Nosotros pensamos en la idea de no tirar una máquina y adquirir las viejas para contar con piezas con las que abastecer a esos clientes”.
Un almacén de piezas para máquinas de huevos
Fue así como surgió la idea de montar un almacén de piezas de segunda mano de este tipo de maquinaria, “despiezando antiguas, que revisamos y limpiamos. No existen en ningún punto del mundo un almacén como el nuestro”, destaca esta empresaria, que señala que, si bien en Europa y EEUU se compra mucha maquinaria nueva, en África y América del Sur es frecuente la adquisición de maquinaria de segunda mano debido a su coste más económico, y es donde principalmente están sus clientes. “Nuestras piezas permiten abastecer y arreglar máquinas sin tener que comprar una nueva”, subraya Ionelam.
“Las primeras máquinas de esta marca fueron mecánicas, pero ya tienen 30-40 o 50 años y ya nos las fabrican. Solo de vez en cuando por pedido fabrican alguna pieza nueva, pero vale muchísimo”, explica, y afirma que se reciclan muchas piezas nuevas de las maquinarias antiguas “que todavía tienen vida. Y no hablamos de uno o dos años, sino de diez años, porque no se desgastan tanto. Cuando se rompen piezas raras nosotros las tenemos y además más baratas que nuevas en caso de existir”.
Al negocio de Simona lo complementa el de su marido, también ingeniero, quien se dedica a reparar esta maquinaria mientras ella provee las piezas. “Somos dos negocios distintos, aunque complementarios y en breve nos vamos a conformar como una única empresa con sendas actividades”, afirma Ionela, que destaca su conocimiento del mercado, lo que le ha permitido crecer a lo largo de estos nueve años.
Ibergrading es una de los proyectos empresariales beneficiados con las ayudas LEADER gestionada por ADAC en el actual periodo de programación. En concreto, ha recibido una ayuda del 44 % de una inversión cercana a los 12.000 euros, destinada a equipamiento y materiales para su almacén y que le va a permitir mejorar sus instalaciones ahora que tienen previsto ampliar el negocio.
Torija, un enclave estratégico
La ubicación estratégica de la provincia de Guadalajara le llevó a elegirla para instalar su empresa. Inicialmente se ubicaron en Cataluña, pero cuando comenzó a funcionar el negocio “vimos que hay mucha actividad en el centro del país. Como además tenemos que desplazarnos por las reparaciones, estando allí la distancia era muy lejana a muchos puntos y queríamos ubicarnos más en el centro, pero no en una gran ciudad. Veníamos de Bucarest y no queríamos vivir en Madrid. Fue así como buscamos y decidimos ubicarnos en Torija, en concreto en el Centro de Iniciativas Empresariales que el Ayuntamiento pone a disposición de las nuevas iniciativas empresariales de la localidad”, explica Ionela.