La cervecera Arriaca, con una denominación muy vinculada a su tierra, arrancaba su producción artesanal pocas semanas antes de que se iniciara el verano de 2014.
Seis años y medio después, y a punto de dejar atrás este recordado 2020, no solo se ha asentado como una de las empresas líder de España en la elaboración y comercialización de cerveza artesana e independiente, sino que acaba de culminar una gran ampliación, la tercera de gran envergadura en su trayectoria, que le permite doblar su capacidad de producción y para la que ha contado con ayudas LEADER europeas gestionadas a través de ADAC.
La fábrica cervecera se sitúa en el polígono industrial Mohedano de Yunquera de Henares (Guadalajara), en el borde de la carretera CM-101 que une Madrid y Guadalajara con la sierra Norte.
El plan director que ha guiado esta última ampliación de Arriaca refleja una inversión en la misma de 750.000 euros. Tres han sido los pilares sobre los que se ha asentado esta reestructuración en Arriaca: la adquisición de un equipo de elaboración más grande, el incremento de la capacidad de fermentación en fábrica y la puesta en marcha de un nuevo sistema de envasado que multiplica las prestaciones del anteriores.
El equipo de elaboración de cerveza más grande de España
El nuevo equipo de elaboración o brewhouse de Arriaca, la cocina donde se hace la cerveza, permite hasta 8.000 litros por cocción, lo que le convierte en el más grande de España entre las microcervecerías artesanales. “Era algo necesario ante el incremento de la demanda de nuestros productos”, sostiene Jesús León, CEO de Arriaca.
A ello le acompaña el mencionado crecimiento de la capacidad de fermentación, que se eleva ahora hasta los 100.000 litros de forma simultánea. Es decir, que esa es la cantidad de litros que pueden reposar al mismo tiempo en los fermentadores de la fábrica de Arriaca mientras maduran hasta que están listos para su envasado y consumo.
En cuanto a la nueva línea de envasado, tanto para el formato botella como el de lata, la capacidad se incrementa ahora hasta las 6.000 unidades de llenado a la hora. Además, se incorpora un sistema de despaletización automático.
Se duplica la capacidad de producción de cerveza
Esas implementaciones en el proceso de elaboración permiten a la cervecera de Guadalajara incrementar notablemente su capacidad de producción desde ya mismo y sienta las bases, ya en un segundo estadio, para que se puedan alcanzar los 2.000.000 de litros al año, apunta el CEO de Arriaca.
El último ejercicio completo contabilizado, el de 2019, reflejó una producción en la fábrica de Yunquera de Henares de 650.000 litros, con una facturación de 1,75 millones de euros. “Lógicamente, la actual crisis sanitaria y económica va a trastocar las previsiones de crecimiento que teníamos para este 2020”, señala León. “Pero teníamos claro lo que queríamos y este inconveniente, de gran impacto para todo el sector cervecero, tan dependiente de la hostelería, no ha sido óbice para que pudiéramos culminar esta ampliación en la que, no obstante, veníamos trabajando mucho tiempo atrás. No queda otra que seguir aportando trabajo, esfuerzo y creatividad”.
Más de 2.400 metros cuadrados de fábrica
La ampliación de Arriaca deja la superficie de la fábrica en algo más de 2.400 metros cuadrados, distribuidos en tres naves distintas -para producción, para envasado y para almacenaje- que evitan cruzamientos indeseados en el proceso productivo y que mejoran ostensiblemente la logística.
Control absoluto de la producción
Además del crecimiento cuantitativo experimentado en esta ampliación, el sistema productivo de Arriaca ha incorporado nuevas tecnologías para el control y la monitorización continua de todo el proceso; y sin necesidad de muestreo exterior, sino que se encuentran incorporadas en los equipos de elaboración y fermentación.
Roberto León, responsable de Ingeniería Técnica de Arriaca, señala en este sentido que “ello nos permite controlar en todo momento la cerveza que estamos haciendo, de tal forma que si observamos cualquier mínima desviación la podamos corregir en tiempo real”.
El objetivo, señala, es que “todos los lotes de una cerveza, de un estilo en concreto, sean siempre igual, otorgando estabilidad, uniformidad y control a un producto; y sin renunciar a su elaboración de forma artesanal”.
Otras de las novedades incorporadas recientemente obedecen a una mejora de la eficiencia energética, como en el aislamiento de los depósitos de almacenamiento, en las redes de refrigeración y en los sistemas automáticos de limpieza CIP (Clean in Place), que, además, ahorran hasta un 50% de agua en este proceso.
Por otro lado, y en términos de seguridad laboral, la fábrica de Arriaca incorpora nuevos sistemas que evitan la comisión de determinadas acciones que podrían considerarse como incorrectas. “Entre ellos se encuentran algunos sensores que sencillamente impiden realizar una acción si esta es insegura”, señala Roberto León.
Ayudas LEADER a través de ADAC para la cervecera
En todo este tiempo, Arriaca se ha apoyado para su crecimiento continuo en las ayudas LEADER gestionadas a través de ADAC. De hecho, la cervecera ha recibido, a través de distintos expedientes de solicitud, un impulso de 140.000 euros de fondos europeos para proyectos enmarcados en esta ampliación a través del Grupo de Acción Local.
Jesús León, CEO de Arriaca, asegura que la aportación de estos fondos LEADER ha sido “fundamental para seguir creciendo y para apostar por una mejora continua de nuestro proceso productivo”. “Las ayudas al emprendimiento y al apuntalamiento de proyectos en el seno rural que llegan a través de estos Grupos de Acción Local”, continúa León, “son una herramienta y un recurso importantísimo que vienen a compensar ese desequilibrio en infraestructuras, en servicios y en otros conceptos que se da entre zonas urbanas y zonas rurales”.